Si, llevo la cuenta: exactamente faltan 14 días (10 días laborables) para cerrar la puerta de la empresa, echar el pestillo a éste blog, coger el coche y ¡comenzar mis vacaciones! Éste año tengo un mes entero para descansar (el mes de agosto) ¡Cómo me gusta éste mes! Personalmente prefiero las vacaciones en plena calor y temporada alta-altísima: agosto: cuando la playa está abarrotada, los precios se disparan y las colas en carretera son larguísimas, como las rectas de las carreteras norteamericanas. ¡Qué bien! otro año más. Éste año, además, me iré de camping a la costa granadina. Alternarémos Rubén y yo las vacaciones campestres con una semana en Torremolinos o Benalmádena, para visitar Málaga capital (con doble intención), Marbella y los propios Torremolinos y Benalmádena. Tengo muchas ganas de ir al IKEA y pasa una tarde-noche entera en Plaza Mayor. No conozco la capital de la Costa del Sol, así que estoy ilusionado (a pesar de que el verano pasado estuvimos 15 días de agosto en Benalmádena y sólo pisamos Málaga para llevar a Ángeles a la estación de bus y aprovechamos para ir a un Burger King de Torremolinos y hacer algúnas compras). A pesar de ello, fuímos todos los días a la playa de Torremolinos. No fuímos de fiesta a ningún lado. Éste año será tres cuartos de lo mismo en este sentido. Nos apetece más descansar y visitar (y gastar, si, tengo ganas de derrochar en el IKEA para decorar el pisito, ir al cine, comer comida basura e ir de tapas). Y sí, me interesa conocer Málaga porque ésta semana hemos pensado en vivir allí. Al fin y al cabo Granada no es la única opción y somos jóvenes, así que podemos escoger ciudad. A todo esto, se le suma que todavía no nos hemos acabado de ubicar, así pues...
Campingo + hotel o apartamento. Pienso que no estará mal. Unas mereecidas vacaciones después de un largo año de trabajo y vacaciones. Ya he comenzado la cuenta atrás.
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