Hay veces en que el ser humano decepciona y hay otras, en que hace vibrar y enmudece al personal. Es eso lo que ha pasado ésta noche junto a Serrano, Pilar, Germán y un servidor al ver -y sentir- "Fronteras", una producción de Da.Te Danza.
En mi caso, es la primera vez que asisto a una representación de danza -en éste caso contemporánea- y me ha fascinado la capacidad de hacer sentir sin el uso de palabras: tan solo el cuerpo y la música.
Dos actores que padecen los sinsabores de la frontera, ésa línea ínfima que nos separa del de al lado... y de nosotros mismo. ¿Quién dijo que estos son buenos tiempos para el alma? Para abastecerse de amor, para salir allí afuera, para comunicarse en la oscuridad...
Fronteras es la línea que separa el tú del yo; el nosotros de vosotros.
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